lunes, 21 de enero de 2019 - 12:11

FELICES 123 AÑOS TALADRO QUERIDO

Hoy se cumplen 123 años de la fundación del club. Conocé la historia del club más grande del sur.

En la segunda mitad de la década de 1880, numerosas familias de origen anglosajón se radicaron en el pueblo de Banfield, situado a 14 kilómetros al sur de la ciudad de Buenos Aires. Estas familias, con sus casas al estilo de las villas inglesas y su dinámica social victoriana, le dieron al suburbio un perfil netamente británico. El 21 de enero de 1896, un grupo de profesionales y comerciantes ingleses residentes en Banfield decidieron fundar un club al que bautizaron con el nombre del pueblo. Este nombre respondía al de la estación del ferrocarril, establecida en 1873 en honor a Edward Banfield, primer gerente de la empresa Gran Ferrocarril Sur. A la cabeza del grupo de fundadores estaban Daniel Kingsland y George Burton, primeros presidente y vice. Kingsland era exportador de ganado a Gran Bretaña y Burton un contador graduado en Cambridge.

El club nació como una institución destinada a cumplir un rol social por encima de lo deportivo y como partido inaugural el 26 de enero se disputó un encuentro de cricket, deporte del que era fanático el presidente Kingsland. La primera cancha del club fue un descampado destinado al pastoreo ubicado a dos cuadras al norte de la estación del ferrocarril, junto a las vías sobre el lado este.

Mientras Kingsland fue presidente, en lo deportivo le dio prioridad al cricket y el fútbol quedó relegado a un segundo plano, lo que explica las pobres actuaciones de los equipos del club en los campeonatos de fútbol de 1897 y 1898. Hasta que en 1899 lo reemplazó el contador Alfred John Goode, un amante del fútbol. En 1899 se disputó el primer campeonato de fútbol de Segunda División en la Argentina, el cual Banfield ganó aventajando por un punto al equipo de la English High School de Alejandro Watson Hutton. Esta conquista convirtió a Banfield en el único club de los que actualmente militan en la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), que fue campeón en el siglo XIX. Sus jugadores eran todos nacidos en Gran Bretaña menos el centre half y capitán James Doods Watson, argentino, nacido en Buenos Aires.
Al año siguiente, como no existían aun los ascensos, Banfield volvió a consagrarse campeón de Segunda División. Esta vez llegó invicto a la conquista, de la mano de los goles de Edward “Invencible” Potter, de las gambetas de Charles Douglas Moffatt, del capitán Doods Watson, y el aporte del presidente Goode en el arco. Por distintas razones, el club comenzó a decaer a partir de 1901, hasta que en diciembre de 1904 fue reorganizado después de que todos sus bienes fueron liquidados para hacer frente a una irremediable quiebra. A partir de este momento crece definitivamente la figura de George Burton, otro verdadero amante del fútbol, quien presidió casi ininterrumpidamente al club hasta su muerte en 1928.
En 1908 el primer equipo del club, que jugaba en Tercera División, ganó el campeonato en forma aplastante. Esta alineación fue la base del excelente equipo de Segunda División de los años posteriores, ciclo que terminó en las semifinales por el ascenso a Primera División en 1910. En diciembre de 1910 el Banfield de William Peterson, Rogelio Jacobelli, Amador García, Carlos Galup Lanús y Bartolomé Lloveras, enfrentó dos veces al Racing Club de Juan Natalio Perinetti, Alberto Ohaco, Romeo Seminario y Pablo Frers por un lugar en la final por el ascenso. El primer partido terminó sin goles. En el segundo encuentro, a 30 segundos del final de los 30 minutos de suplementario, Racing logró el gol del triunfo. El equipo de Banfield se disolvió. El de Racing venció a Boca Juniors en la final y dominó durante una década al fútbol argentino convirtiéndose en el sucesor de Alumni.