COMUNICADO A LOS SOCIOS Y SOCIAS DEL CLUB ATLETICO BANFIELD

El conjunto de “Agrupaciones” políticas estatutariamente reconocidas y vigentes abajo firmantes; como así también “Movimientos de socios y socias autoconvocados” y “Socios y socias independientes del Club Atlético Banfield”; quienes decidimos a partir del presente comunicado y, en virtud de la claridad del objetivo que nos une autodenominarnos “GRUPO PERDERNERA”, queremos hacer saber a los socios y socias de nuestro amado club lo siguiente:

Que desde hace aproximadamente tres años, por iniciativa de un grupo de socios y vecinos de Banfield, se empezó a analizar la posibilidad de adquirir para nuestro club el inmueble perteneciente a la congregación de los Testigos de Jehova, ubicado en la calle Pedernera Nº 1539 de la localidad de Banfield.

Para quienes no lo conocen, se trata de un predio de aproximadamente 18.000 metros cuadrados (Superficie similar a la que posee el Country Club de Banfield), ubicado a unas 10 cuadras del estadio Florencio Sola, con condiciones óptimas para el desarrollo social de nuestro club, como así también para el crecimiento de las actividades amateurs de la institución.

En aquel entonces, el anterior presidente Eduardo Spinosa (quien actualmente conduce el club desde las sombras) se transformó en el abanderado de la iniciativa, al igual de muchos de los miembros de la actual comisión directiva.

Como parte del avance de aquella negociación, que luego resulto trunca, visitaron el predio importantes y destacadas personalidades del club, incluso el actual intendente municipal Martín Insaurralde, quien ofreció informalmente el apoyo de la intendencia para la concreción de dicha adquisición.

El precio final de compra por entonces sería por un valor de U$s 2.500.000.- (Dólares dos millones quinientos mil), sin ninguna posibilidad de financiación ni opción de alquiler del predio.

Nadie puede explicarse porque aquellas negociaciones fueron tempestivamente abandonadas por el anterior presidente; máximo si se tiene en cuenta que la actual presidenta manifestó en medios nacionales, al momento de asumir su mandato, recibir de su antecesor (hace apenas 6 meses) un club 95 % saneado (es decir sin deudas), con una próspera economía, hecho que también se vio parcialmente reflejado en el balance correspondiente al ejercicio N º 114, que cerró la gestión formal de Eduardo Spinosa al frente del club.

Sin embargo, a principio del corriente año, un grupo de socios y socias del club decidimos retomar las negociaciones para la adquisición del predio, en el convencimiento de que se trata de una oportunidad única para el crecimiento de nuestro club que de ninguna manera podemos dejar escapar.

En dicha inteligencia, con fecha 13 de Febrero del corriente año ingresamos nota al club informando que, como consecuencia de nuestra gestión, el nuevo precio de compra del predio sería por un valor de u$s1.600.000.- (dólares un millón seiscientos); es decir u$s 900.000.- menos que lo negociado un año atrás por la anterior comisión directiva; y que existía la posibilidad de conseguir para el club una financiación a través de la compra de un grupo inversor e incluso de establecer un alquiler por 10 años en favor del club, con opción a compra.

Dicha nota motivó a una posterior reunión informal con algunos miembros de comisión directiva, representantes de la inmobiliaria Degal (intermediario propuesto por los Testigos de Jehova) y el conjunto de socios y socias “GRUPO PEDERNERA”, que se llevó adelante en el estadio el pasado día 21 de Febrero, donde todo lo manifestado precedentemente se puso en conocimiento de los representantes del club.

De aquella reunión, donde los miembros de comisión directiva presentes manifestaron informalmente que “el club no poseía dinero para la compra” y se nos invitó a los socios a generar alternativas de financiación a largo plazo para la adquisición, devino la presentación de la nota que ingresáramos al club con fecha 15 de Marzo del corriente año, donde intimamos a la comisión directiva a que en un plazo corrido de 10 días manifieste por escrito si existía la decisión política de compra o alquiler de dicho predio y, en caso afirmativo, indique eventuales avales ofrecidos para la financiación crediticia, elemento indispensable para la tramitación de cualquier crédito.

Transcurridos los 10 días y sin haber recibido respuestas formales ni informales, es claro que la decisión política de la actual Comisión Directiva del Club es que NO le interesa la adquisición del predio de la calle Pedernera 1539 de la localidad de Banfield para nuestro club.

Toda vez que efectivamente “EL CLUB ES DE LOS SOCIOS Y SOCIAS” y que el estatuto social en su artículo 102 prevee la convocatoria a asamblea extraordinaria por petición de los asociados (únicos dueños del club), cuando la misma sea acompañada por la firma del 5 % de los socios y socias del club con derecho a voto, hacemos saber a los asociados en general que nos abocaremos a partir del día de la fecha a la recolección de firmas con el fin de la petición formal de dicha asamblea extraordinaria.

La orden del día propuesta a la asamblea será clara y concisa: “Cambiemos activo por activo”; para que la comisión directiva reciba el mandato de la asamblea (máximo órgano de decisión de nuestro club) de vender un porcentaje indiviso que no supere el 25% de algún ó algunos jugadores (profesionales ó juveniles), hasta alcanzar el monto de u$s 1.600.000.- (dólares un millón seiscientosmil), comprometiéndonos los socios y socias a trabajar en una instancia ulterior en la recaudación extraordinaria de fondos para la inversión que permita la puesta en funcionamiento del predio para los asociados.

Por un Banfield aún mas grande, vamos TODXS POR PEDERNERA.

GRUPO PEDERNERA.