El
fútbol tiene éstas cosas, venís de ganar el clásico y perdés con baile de local
ante Argentinos Juniors. No hay punto medio. Nada bien le salió hoy a Banfield
ante un rival oportunista y que sabe muy bien a lo que juega. El gol tempranero
de Cabrera a los 8 minutos de juego, complicó las cosas. El Taladro entró en la
desesperación por querer empatar, pero no tenía las armas para inquietar al
Bicho. En cambio ellos, rotaban la pelota, salían jugando claro desde el fondo,
entendían qué hacer en la zona media, y complicaban en ofensiva. Fueron pasando
los minutos, el aliento del hincha no alcanzó y Banfield se iba al descanso
perdiendo 2 a 0 por el tanto de Lucho Gómez, quien cumplía con la ley del ex.
Fue el golpe de gracia. El segundo tiempo estuvo de más. Ellos no se
inquietaron, cedieron el protagonismo y Banfield no supo que hacer con eso. No
generó peligro, sólo un remate de Galoppo en todo el partido. Caerle a un solo jugador
sería injusto, todo el equipo jugó mal, sin excepciones. Habrá que hacer borrón
y cuenta nueva rápidamente porque el martes habrá un partido determinante ante
un duro rival como Santos de Brasil. Posiblemente Dabove meta mano en el equipo
y haga variantes.