miércoles, 21 de septiembre de 2011 - 12:47

Banfield y Olimpo no se sacaron ventajas

El Taladro desaprovechó una interesante posibilidad de sumar por segunda vez tres puntos en el campeonato, ratificar lo realizado en Floresta ante All Boys y comenzar a salir del fondo de la tabla.\n\nDurante los 90 minutos, Banfield sufrió una vez más por la falta de puntería de un equipo que no encuentra la fórmula para poder lastimar en los metros finales. Si bien hasta la salida de Achucarro -lesión en su pierna derecha- el equipo había saltado al campo de juego con una versión más agresiva que intentó hacerse dueño de la pelota y por sobre todas las cosas protagonista en casa, solo fueron destellos de lo que sería una noche con las dificultades de siempre.\n\nA Olimpo, la polenta de Julio Furch y el virtuosismo simplista de Martín Rolle, le alcanzaron para irse al descanso por la mínima.\n\nLa buena producción del enganche bahiense, sumado al flojo desempeño de la contención local -flojo Carboni aunque levantó en la segunda etapa, ¿Acevedojugó?-, inclinaron la balanza al favor de los de De Felippe y levantaron nuevamente los fantasmas archivados el sábado por la tarde.\n\nEn el segundo tiempo llegó el cambio de esquema, ese que tanto le gusta a La Volpe, y como ante el Albo, el Taladro llegó a marcar en la red contraria las intenciones que la mala fortuna y Laureano Tombolini le habían negado en la primera etapa.\n\nTras un centro ejecutado sorpresivamente al corazón del área -hasta el menos futbolero ya sabe que Banfield juega corto, siempre-, Facundo Ferreyra peinó como en toda la noche ante los centrales de Olimpo y Maximiliano Laso apareción por el segundo palo ante un vencido arquero.\n\nListo. Empate, explosión, abrazos, equipo feliz, dos goles en dos jugados, a partir de ahí la desnivelación en el juego y el incremento de goles llegaría por decantación. Pero no. Banfield llegó al empate y como por arte de alguna fuerza extraña, el equipo se fue diluyendo y quedó como siempre en buenas intenciones.\n\nMás allá del resultado con sabor a poco, una vez más se notó la mano del entrenador -metido como siempre y armando un show propio dentro del partido-, que buscó con sus variantes modificaciones tácticas, que conoce las limitaciones dele quipo y que trabaja para potenciar las virtudes.\n\nNo es un dato menor que la última línea vuelva a encontrar la solidez habitual y que el bloque defensivo, más allá de los nombres, brinde la posibilidad de cambiar sobre la marcha. No es poco que el Laucha vuelva a responder cada vez que lo llaman como nos tiene acostumbrados.\n\nEn este largo camino en busca de la la palabra equipo, el Taladro da señales. Algunos jugadores son los principales responsables de que esto suceda: Eluchans el abanderado. Y como el propio entrenador manifestó a sus dirigidos, "en los deportes como en todas las cosas de la vida, se vence con la cabeza, se llega con el corazón y se llega aún más allá con la voluntad tenaz e implacable de vencer", lo que se dice en el barrio: con sangre, hambre de gloria y convencidos de lo grande que es una camiseta que tiene al 70% del Sur alentando y empujando por detrás.